Alma Animal



Lo he dicho algunas veces, yo no soy una persona que se lleve muy bien con la religión. Años de misas inentendibles, de falta de argumentos lógicos para creer en ritos de cualquier tipo me hacen ver a la religión como innecesaria. Pero de todas las cosas que las iglesias, ya sean judías, católicas o lo que sea, se esfuerzan por promulgar hay una idea que siempre me ha molestado terriblemente: que se diga que los animales carecen de alma.

Muchas personas son capaces de creer que si hay un incendio donde mueren cientos de personas pero una estatua del divino niño permanece intacta es un milagro, como si para un dios misericordioso fuera más importante una imagen que una vida. Yo más bien creo que si existe dios pues debería ser un ente que respete todas las formas de vida del planeta.

"Emoción: excitación repentina del ánimo". "Ánimo: alma o espíritu". Sin alma o espíritu no hay emoción. Lastima a un perrito y mira en sus ojos, allí hay tristeza. O cuando abres la puerta de casa y sale disparado a brincar para saludarte porque está contento de que hayas llegado; en esas acciones hay una emoción que aunque básica no deja de ser la expresión de un sentimiento.

¿Es necesario poseer razonamiento para tener alma? Sí es así tal vez sea porque la razón nos deja inventar la idea del alma. Pero yo no creo que el alma sea una creación del cerebro y por lo tanto no creo que un cerebro poco desarrollado deba carecer de alma. Un animal existe y quiere y escoge cosas de la vida en su propio nivel animalístico no comparable con el humano pero real.

"En el siglo XVII, la iglesia católica controlaba la mayor parte de las investigaciones al respecto y seguir aceptando el punto de vista que mantuvo hasta después de San Agustín, reconociéndoles a los animales la posesión de todos los aspectos de la mente incluídos la vida espiritual y el alma, no les convenía más. Es entonces cuando revisa sus opiniones y decide negarles junto con la inteligencia, las emociones, el estado consciente y los demás aspectos de la mente y el alma a los animales".

Es decir, que en sus inicios la iglesia aceptaba el alma en los animales pero para evitarse explicaciones que no poseían y para promulgar la supremacía del ser humano ante las otras especies eligieron olvidar la teoría inicial.

Las personas que compartimos bastante tiempo junto a una mascota como para observar su comportamiento diario y leer en sus acciones hasta las más variadas personalidades estarán de acuerdo conmigo. Firmes creyentes pensarán que soy una niña idealista que simplemente se rehúsa a creer que mi perro no siente aunque parezca que lo hace, pero no, ese no es el motivo de este texto. No es un canal por el cual expresar un miedo a la ausencia eterna de mi mascota, es separarme de la idea egoísta de que el alma es solamente ámbito humano.

Charles Darwin dedicó mucho tiempo a la observación animal y llegó a la conclusión de que, "los sentidos e intuiciones, las distintas emociones y facultades, como el amor, la memoria, la atención, la curiosidad, la imitación, la razón, y otras cualidades de las que se jacta el hombre, se encuentran en condición incipiente, y a veces bien desarrolladas, en los animales inferiores".

Dejando de lado doctrinas religiosas, mirando objetivamente a un ser vivo en su comportamiento ante el miedo y el cariño...¿puedes ver en él aunque sea por un instante su alma?